Jill Johnson (Camilla Belle), una estudiante de bachillerato, se
prepara para trabajar de canguro una noche más en una casa situada en
una lejana colina. Una vez dormidos los niños, Jill asegura la puerta y
conecta la alarma. Pero la tranquilidad de la joven se transforma en
miedo cuando unas misteriosas llamadas telefónicas insisten en que
compruebe si los niños se encuentran bien. Su miedo se convierte en
terror cuando, gracias a la policía, localiza las llamadas y comprueba
que proceden del interior de de la casa.