Secuela de "Arthur y los Minimoys" (2006). En esta ocasión el
protagonista viaja, junto a la Princesa Selenia y su hermano Betameche,
en busca de la ciudad prohibida de Necrópolis, hogar del malvado brujo
Maltazard. "¡Ayuda!" Este grito de alarma inscrito en un grano de arroz y
dejado por una araña mensajera pone a Arthur en alerta: "Los Minimoys
están en peligro. ¡No hay ni un segundo que perder!". Justo en este
momento el padre de Arthur decide partir antes de lo previsto, y espera
impaciente al volante de su coche. Arthur tiene el tiempo justo para
prevenir a su abuelo Archibald para que acuda a la llamada de auxilio en
su lugar... pero imaginar a Sélénia en peligro es difícil de soportar.
Con la complicidad de su perro Alfred, Arthur engaña la vigilancia de
sus padres y regresa en plena noche a la casa de sus abuelos. Sin
embargo, una nube se aproxima peligrosamente a la luna en la media
noche, la hora en la que sus rayos deben alcanzar el telescopio de
Archibald y abrir la puerta hacia el mundo de los Minimoys.